jueves, 8 de octubre de 2009

La décima sinfonía

Este es el título de un libro que salió al mercado hace más de un año. Sigue estando en mi lista de espera de libros para leer, desgraciadamente la lista se va hacienda cada vez más larga porque no le hago limpieza, hace tiempo que no leo. Es un libro bastante interesante porque tiene banda sonora, incluye un CD con canciones, las cuales concuerdan con sucesivos fragmentos (o escenas, ambientes) del libro.
La décima sinfonía es una novela escrita por Joseph Galinek. Empieza cuando el superior de Daniel Paniagua, especialista en la obra de Beethoven, le encargan de ir a acudir el concierto privado del compositor Ronald Thomas, la acción se desarrolla a partir del asesinato de Thomas, decapitado y cuando la policía encuentra su cabeza hay una pentagama tatuada encima, todo gira entorno de la décima sinfonía de Beethoven, de duda de si existe o no? El detalle más llamativo al ojear el libro en la librería fue su banda sonora, era la primera y la única vez que había visto un libro con banda sonora, conforme vas leyendo el libro van apareciendo escenas con las cuales concuerdan una canción,
La décima sinfonía es una expression envuelta por misterio, es como si fuera malvado conjuro para los compositores. Desde que Beethoven murió sin lograr acabar su décima sinfonía, sucesivos sinfonistas como Schubert, Bruckner, Dvorak y Mahler, han fallecido al acabar la novena sínfonía, sin poder componer la décima, Bruckner incluso murió antes de terminar la novena. Sobre la maldición de la sínfonía y Mahler, hay una conocida anécdota, Mahler al acabar la octava sinfonía, se vio enfrentado con la siguiente, conocía los casos de los anteriores compositores, que llegaron a la novena sinfonía y él temía morir después de acabarla como ellos, sin embargo quiso buscar remedio para evitar. Lo que hizo fue componer una obra bautizada como “Das Lied von der Erde” ( La canción de la Tierra); esa obra en el fondo sustituía a la novena sinfonía, y de hecho su estructura musical era la exactamente la misma que la música sinfónica. De este modo, el hombre pensó que había vencido la maldición y empezó a componer la décima sinfonía pensando que estaría a salvo, pero poco después de comenzarla, murió, el tampoco había engañado al destino.
Yo jamás he sospechado la certeza de este hecho, hasta que he leído un artículo hoy sobre el asunto, tanto su texto original en ingls como su versión traducida en español, por si ambos no coinciden. Según el autor, no es verdad, porque antes de que Mahler muriera, sólo se conocían siete sinfonías de Schubert y cinco de Dvorak, las otras fueron encontradas años después, de manera que, sólo quedaba el ejemplo de Beethoven, ya que Bruckner no finalizó ni la novena, así, quedaba muy pobre para justificar el argumento anterior y decir que “Mahler temía la décima sinfonía.”
Yo, personalmente no me inclinaría más a ninguna de las dos teorías, porque ambos me han sido interesantes, eso de que encuentran a obras restantes tras la muerte de los maestros de música, suena intrigante. Por otra parte, para qué decir verdadero o falso, si los que lo pueden decir son los mismos compositores, si es que tienen posibilidad de resucitar y si nos contaran la verdad.

1 comentario:

  1. Hola, pues la verdad es que me parece interesante la pagina, le echare un vistazo y tal, me alegro que te guste la historia. ^^
    Espero que pueda escribir muchos capítulos mas, la cabeza me rebosa de ideas XD. Besos. =3

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