Posseït

Sóc més lluny que estimar-te. Quan els cucs
faran un sopar fred amb el meu cos
trobaran un regust de tu. I ets tu
que indecentment t'has estimat per mi
fins al revolt: saciada de tu,
ara t'excites, te me'n vas darrera
d'un altre cos, i em refuses la pau.
No sóc sinó la mà amb què tu palpeges
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Un poema el cual nos presentó el profesor de literatura hace una semana.

El yo poeta se dirige a la amada que lo abandonó, según él lo que siente es algo más que amor por ella. Tiende a insistirle lo unidos que ha estado él con ella, llegando a tal altura que cuando se alimenten de su crudo cadáver, podrían saborear un resto de la amada. Es un amor convertido en maldición, o también una amenaza de –si no estas conmigo, dejas de ser humano complete porque siempre quedará una sombra mía en ti-, hasta la mano con la que te acaricias me pertenece.
Ahora que ya no me tienes importancia, “*te excitas por mi* “esto personalmente, me suena al orgullo del hombre que prefiere humillar a la otra que ser humillado él mismo.

Es una ansia de dominar una persona, en la que tal vez revuelque la pasión pero no tiene en cuenta lo que es realmente el amor, y si piensa que lo es, es un amor equivocado, desconoce una manera adecuada para expresar sus sentimientos. Es obvio el dolor y la ansiedad del desamor y comprensible, más si ha sido una relación profunda, ¿pero qué consigue uno insistiendo con mala intención una relación ya inexistente?, ¿mejor, o como un ignorante?
La pretención de poseer una persona rapta el verdadero significado del querer.